miércoles, 29 de junio de 2016

Terapia de grupo. Manual de supervivencia.

 Si por algún motivo te han planteado la posibilidad de ir a terapia de grupo, es posible que te estés imaginando algo así:

Devianart; Ilustr. by shapesofabullet
· un círculo de sillas muy amplio
· mucha gente cariacontecida
· una presentación estereotipada y alienante
· un ambiente que no invita a la alegría

Para quien no ha participado antes de ningún grupo de terapia es casi inevitable que le acuda esta imagen a la mente, ya que en general conocemos la terapia de grupo a través de las películas (normalmente dramas) o en todo caso de oídas.

En España, además, resulta que la terapia de grupo no ha tenido mucha presencia hasta hace unos años, si exceptuamos el tratamiento de las adicciones. Por este motivo, cuando le ofrecemos la posibilidad a alguien de incorporarse a un grupo de terapia, no es raro que nos pregunte: “¿como alcohólicos anónimos?”

Suele ocurrir que, aunque le aclaremos al paciente que el modelo de Alcohólicos Anónimos funciona muy bien en su campo, pero que hay otros modelos, es inevitable que sigan quedando dudas en torno a la idea de empezar a ir a terapia de grupo.


¿Cuáles son las principales preocupaciones que nos comentan en consulta?
  • ¿No me hará sentir peor el escuchar los problemas de otra gente?
  • ¿No es más efectiva o “concentrada” la terapia individual?
  • Si voy, ¿encajaré en el grupo? ¿Seré aceptado/a?
  • ¿Seré capaz de conectar con alguien o me verán como un bicho raro?
  • ¿Habrá gente que esté muy mal?
  • ¿Seré yo el/la que esté peor?
  • ¿Cuáles son las normas?
  • ¿Se atenderán mis necesidades?

Ilustr. vía: http://williamsburgtherapygroup.com/
Todas estas dudas son completamente normales, y a cualquier persona que haya pasado satisfactoriamente por una terapia de grupo le resultarán familiares estos miedos previos a la misma. Todas ellos van desapareciendo conforme uno se incorpora y van pasando las sesiones.

Cuando imaginamos un futuro y sentimos miedo, tendemos a ponernos en lo peor. Sin embargo, la gente que encontraremos en el grupo será muy parecida a nosotros mismos. Porque aunque nos diferenciemos en los detalles, las personas compartimos lo fundamental. Además, el terapeuta se encarga de conformar el grupo pensando en un objetivo común: descubrir y cambiar las dificultades de relación que sufrimos con nosotros mismos y con los demás.

En este video, el psiquiatra y terapeuta Irvin Yalom, en cuyo modelo de terapia interpersonal basamos nuestros grupos, explica cómo se selecciona a los integrantes de un grupo para que éste pueda ser más productivo:



La misión del terapeuta, como vamos viendo, no es tanto lanzar intervenciones reveladoras ni tener un papel protagonista. El terapeuta convoca a los participantes y crea un espacio de seguridad, favorece que el clima sea de apoyo, evita las distorsiones y se asegura de que se cumplan las normas. Conduce la terapia y facilita el intercambio.

Eso no quiere decir que “recibamos menos terapia”, más bien al contrario. Para las dificultades de relación precisamente lo que necesitamos es poder relacionarnos. Parece que nos sentimos mucho más cómodos en el refugio de la terapia individual, donde quizás ya llevamos un tiempo con nuestro/a terapeuta y sabemos que nos va a cuidar. Pero esa sensación de comodidad también tiene la contrapartida de que no estamos desafiando nuestros hábitos. La terapia individual en estos casos se convierte en algo así como un piano de dos notas, con un registro muy limitado. En el grupo podemos tocar con todas las teclas.

En una entrada anterior enumeramos todos los factores que explican la eficacia de la terapia de grupo. Si tuviéramos que resumirlos en un frase lo haríamos de la siguiente manera:

La terapia de grupo sirve como un laboratorio donde experimentar de forma controlada con formas nuevas de actuar, o un gimnasio en el que poder entrenar y fijar hábitos que nos hagan menos daño.

No es lo mismo comprender que empezar a cambiar. Muchas personas sienten que se atascan después de tiempo yendo a terapia de forma individual. Entienden lo que les pasa, pero una y otra vez acaban cayendo en los mismos problemas. La terapia de grupo nos ofrece una oportunidad inigualable, no sólo para terminar de comprender, sino para empezar a cambiar.



@JcamiloVazquez

No hay comentarios:

Publicar un comentario